“Mediador: Alguien que se interpone entre dos o más partes en desacuerdo a fin de reconciliarlas.” —Perspicacia, vol. 2, p. 351
Si Jesús no es el mediador que te “reconcilia” con Dios, entonces ¿quién sí lo es?
“Jesucristo, no es el Mediador entre Jehová Dios y toda la humanidad. Es el Mediador entre su Padre celestial, Jehová Dios, y la nación del Israel espiritual, que está limitada a solamente 144.000 miembros.” —Seguridad Mundial Bajo el “Príncipe de Paz,” p. 10-11
“Piense en un caso jurídico en que participe un procurador o abogado … Por supuesto, usted no tiene parte en ese caso jurídico, y en ese sentido él no es procurador para usted … las personas de todas las naciones … se benefician de los servicios de Jesús. Aunque él no es el Mediador jurídico de esas personas, porque ellas no han entrado en el nuevo pacto, él es su medio de acercarse a Jehová.”—La Atalaya, 15 de agosto, 1989, p. 31
Si no contratas al “abogado,” ¿cómo puedes “acercarte” a él por sus servicios? Si Jesús no es tu “abogado” (mediador), ¿cómo puede servir como un agente mediador entre tú y Jehová Dios?
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